Maneras de fomentar el orden en la infancia

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El orden es la estrategia que nos permite tomar consciencia de nuestra relación con las cosas, los otros y con nosotros mismos. Con ello, nos hacemos más responsables con nuestras decisiones, podemos generar ideas más claras, diferenciar las reales necesidades y darle más espacio a nuestras acciones, pensamientos y emociones.

La organización de los espacios, refiere a la disposición metódica y armoniosa de los objetos, que nos permite una estabilidad emocional, una mente más liberada y una vida más tranquila. Esta organización externa, nos permite la transferencia hacia lo interno, pudiendo favorecer nuestra seguridad, confianza y nuestras relaciones personales y sociales.

Existen un sin fin de beneficios que nos reporta el orden, los cuales favorecen todos los niveles del ser, ya sea físico, mental, emocional y espiritual.

El orden nos permite:

  • Ser más eficientes, ya que podemos encontrar más fácil y rápido las cosas que necesitamos, ahorrando tiempo y esfuerzo.
  • Ser más creativos, debido a que mediante la acción de ordenar buscamos múltiples opciones de organización y de solución.
  • Dormir mejor, ya que nuestra mente puede descansar mejor, sin exceso de información visual, física y energética.
  • Ser más activos, pudiendo estimular el movimiento y la acción, favoreciendo nuestra salud física.
  • Aumentar nuestros niveles de concentración, al poder focalizar nuestra mente de manera más asertiva.
  • Comprender el valor de la disciplina, como habilidad para la vida.
  • Saber respetar el espacio de los demás y aprender a convivir de manera armónica.

Estos beneficios y muchos otros, aparecen y trascienden cuando somos capaces de apreciar la belleza del proceso del orden y no sólo su resultado final. Los seres humanos vivimos más plenos cuando somos capaces de ello, de valorar los procesos que implican nuestros actos.

Orden e Infancia

¨Cuando hablamos de ser capaces de ordenar, estamos haciendo referencia a la capacidad de dominar tres características esenciales como personas: saber manipular correctamente los objetos que nos rodean, saber convivir con otras personas y saber llevar una vida activa. De ahí la importancia de que eduquemos en el hábito del orden desde pequeños.¨
Nagisa Tatsumi

Es importante comprender la necesidad de que es pertinente observar como adultos nuestra relación con el orden para así poder instaurarlo en niños y niñas. Tenemos que aprender a hacerlo nosotros mismos para luego poder compartirlo.

Inculcar el hábito de ordenar en la infancia, es asertivo guiarlo desde la consigna que no es sólo porque les corresponde, sino porque aprenderán muchas cosas. Cuando entienden y valoran el proceso, todo les resulta más satisfactorio, toman consciencia de cada uno de sus actos.
La labor consiste en guiar en dicho proceso, ya que ellos y ellas no saben hacerlo, no saben ordenar, no conocen la manera y es ahí la importancia de nuestra intervención como educadores, padres, madres, cuidadores, etc.

Es pertinente:

  • Enseñarles el cómo y cuándo deben ordenar.
  • Facilitarles el sacar y guardar cosas por sí mismos.
  • Mostrar la necesidad de no dejar cosas sobre otras.
  • Devolver a su sitio lo que han sacado.

La habitación de los niños y niñas es un espacio no solamente donde pasan tiempo, juegan y descansan, sino que es un lugar donde pueden desarrollar su identidad, y es por esto la importancia de tomar consciencia sobre cómo organizamos ese y otros espacios donde se desenvuelven. El cuidar de su espacio, les permite responsabilizarse de sí mismos y de sus pertenencias. El hogar, la escuela, el jardín infantil y todo espacio físico donde pasen horas, deben ser lugares tranquilos, seguros y ordenados para contener y gestionar sus emociones.

¿Cómo fomentar el orden en la infancia en lo práctico?

  • Organizar sus juguetes en cajas según categorías establecidas por ellos/as mismos. Una caja los legos, otra para los libros, otra para los peluches, etc.
  • Estas mismas cajas pueden ser ubicadas según necesidades: cosas que se usan con frecuencia, cosas que se ocupan con menos frecuencia, un poco de todo, etc.
  • Limitar la cantidad de juguetes, clasificando los de uso constante versus los que ya no se ocupan, para donarlos, regalarlos, venderlos, etc.
  • Para la mochila del Jardín o Escuela buscar un lugar accesible para que el niño o niña la deje en el mismo lugar todos los días al llegar a casa.
  • Todo lo que el niño/a utiliza habitualmente, situarlo en un mismo lugar para acceder de manera más práctica a ello. Por ejemplo: En un perchero a la entrada del hogar o en su habitación ubicar su mochila, su chaqueta, su lonchera, etc.
  • Para el mueble de la ropa, organizarla en subgrupos: Poleras, pantalones, chalecos, etc. La ropa interior y calcetines es aconsejable contenerlos en alguna caja más pequeña para mantener su orden más fácil.
  • Asignar tareas al momento de preparar o retirar la mesa, pidiéndoles que lleven el cubierto, su plato al finalizar, ayudar a barrer, entre muchas otras labores que resultan entretenidas para ellos/as. La labor realizada irá variando de acuerdo a la edad en que se encuentren, por lo que puede ir siendo más compleja.
  • Al momento de cocinar, invitarles a ser parte de dicho proceso y mostrar mediante la acción que al momento de hacerlo debemos mantener un orden para que todo resulte mejor. Esto quiere decir que dispondremos de los ingredientes y utensilios a ocupar, para luego a medida que los vayamos desocupando, deben ser devueltos a su lugar y así despejar el espacio de trabajo.

Peggysue.S.S